¿Y tú sabes qué es el Internet de las Cosas?

Desde la llegada de Internet a nuestras vidas, éste ha evolucionado de una forma veloz y apabullante, desde aquellos rudimentarios módems de 56 KB hasta las rapidísimas y eficaces líneas de fibra óptica actuales, y conforme la tecnología y la infraestructura han ido avanzando, cada día es más fácil conectar cualquier dispositivo a Internet, lo cual nos permite a los usuarios tener el control de ellos de manera remota y desde cualquier parte del mundo.

Desde hace ya unos años se empezó a hablar del IoT (Internet de las cosas, por sus siglas en inglés) dejando de ser una apuesta a futuro y comenzando a ser una absoluta realidad.

Pero, ¿qué es? Consiste en la conexión a Internet que existe no nada más en los dispositivos que comúnmente se conectan a internet (teléfonos móviles, computadoras, tabletas), sino también en dispositivos de uso diario y que posiblemente no están hechos para conectarse a internet, pero que con ayuda de componentes específicos es posible habilitarlos para conectarse a internet e interactuar con ellos de forma remota, ya sea para monitorearlos o controlarlos.

Uno de los ejemplos más claros del uso de IoT lo encontramos en nuestras casas, dónde seguramente cuentas con algún o algunos aparatos que puedes controlar desde otro dispositivo sin tener que levantarte del sillón o de la cama, como puede ser encender o apagar las luces, cambiarle el color a la iluminación, abrir y cerrar cortinas, la temperatura del aire acondicionado, bocinas o sistemas de audio que automáticamente reproducen tu canción favorita apenas entras a tu casa, hasta electrodomésticos inteligentes, a estos se les conoce como “casas inteligentes”.

De hecho, hace algunos meses instalé en casa dos Google Home(altavoces inteligentes fabricados por Google) con el cual puedo configurar, administrar y controlar varios dispositivos inteligentes conectados como luces, televisiones, bocinas, termostatos entre otros. Después de descargar la aplicación, puedo crear módulos de comando que se pueden integrar con las aplicaciones del Asistente de Google, como Tasker y Autovoice, para automatizar ciertas funciones. Por ejemplo, cuando me levanto solo basta decir “Hey, Google”, y el Home ya sabe que tiene que apagar el aire acondicionado, cambiar el color de las lámparas de techo y encender la TV en el noticiero deportivo. Otro ejemplo es pedirle que reproduzca cierto playlist en Spotify o una serie de Netflix en el televisor que elijas. Además, puedo conectar el Home a mi cuenta de Uber y a otros servicios de terceros, de esta manera solo basta decirle al Home que me pida un Uber o una pizza de Dominos y en cuestión de minutos estará el chofer o el repartidor en la puerta de mi casa.

Así como el Internet de las Cosas me ayuda en casa, existen otras aplicaciones en diferentes ámbitos, como es el caso del industrial, donde existen sensores que monitorean el nivel del agua de los tinacos que se encuentran en la azotea de edificios, evitando que el administrador del edificio tenga que subir a revisar el nivel de cada uno en caso de alguna falla, el cual es consultado por una aplicación para smartphones. En el campo de la salud, específicamente veterinario, hay dispositivos que monitorean la frecuencia cardiaca o la presión arterial de las mascotas, y en caso de detectar que están en un nivel crítico, envían alertas automáticas para poder atenderlo de manera oportuna y salvarlo.

Como podrás darte cuenta, el uso o implementaciones de IoT son prácticamente ilimitadas y de gran utilidad. Como en el caso de las casas inteligentes, si tienes una idea para monitorear o controlar algún dispositivo desde tu teléfono móvil ¡no dudes en contactarnos! Comunícate con nosotros o déjanos un comentario en este post para conocer tu proyecto y poder hacerte una propuesta y así, podamos hacerla realidad juntos.